Comprender el continuo de la salud mental

Se ha tratado de explicar la diferencia entre una buena salud mental y los problemas de salud mental a través de un rango o un continuo. Es decir, sentirse bien, funcionar bien (una buena salud mental) estaría representado en un extremo, y se podría ir avanzando hasta el otro extremo dónde se encontrarían los síntomas o problemas graves de salud mental. La salud mental no es fija o estática, y podemos avanzar y retroceder a lo largo del continuo en diferentes momentos de nuestras vidas.

En un extremo del continuo, las personas están bien; muestran resiliencia y altos niveles de bienestar. En  la zona media, las personas pueden comenzar a tener dificultades para sobrellevar o afrontar situaciones. En la zona de la derecha, las personas tienen más dificultades para afrontar situaciones y los síntomas pueden aumentar en severidad y frecuencia. Al final del extremo derecho las personas pueden experimentar síntomas graves y correr el riesgo de auto-lesionarse o suicidarse.

Es importante recordar que la salud mental es compleja. El hecho de que alguien no esté experimentando un problema de salud mental no significa necesariamente que su salud mental esté en buen estado. Del mismo modo, es posible ser diagnosticado con un trastorno de salud mental y a su vez sentirse bien en muchos aspectos de la vida.

En última instancia, la salud mental consiste en ser cognitivamente, emocional y socialmente saludable (es decir la forma en que pensamos, sentimos y establecemos relaciones) y no simplemente la mera ausencia de un problema de salud mental.

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